En su primer articulo para nuestro blog el Director e Instrutor de Cocktail Club: Ricardo Subelzú aporta su opinion de Bartender apasionado por lo que elijió para ser su profesion y su vida (asi como muchos de nosotros) sobre um tema delicado y polemico, pero que en realidad es muy comun en las escuelas y cursos de bartender.
Los Bartenders del Futuro
¿Informalidad o Compromiso?
Previo a las fiestas
de fin de año, citamos a un Bartender ya recibido hace dos años para trabajar
en un evento privado, una ves acordados los detalles del mismo, y confirmado su
asistencia, nos llamo el mismo día del evento unas horas antes para decirnos
que no podría asistir, el motivo: “me había olvidado que tenía una reunión de
fin de años con amigos”
Bartender, Barman, Flair Bartender, las
escuelas de coctelería formamos, educamos todos los días a personas que llegan
a nuestros centros en búsqueda de… de que?
De los cientos de chicas y chicos que recibimos
en nuestras escuelas año a año, son pocos, diría contados con los dedos de la
mano quienes realmente sienten un real interés en hacer de esta profesión,
mucho mas que una vidriera para alimentar sus egos, o una alternativa de
estudio para cumplir con las exigencias de sus papas.
Año a año el problema se acentúa, la presencia
personal al asistir a un curso, el lenguaje al hablar con compañeros y
docentes, la postura y gestos en una clase, el abrir la boca constantemente
para decir pavadas, las constantes
faltas sin motivos reales, el cero interés en investigar sobre tareas
asignadas, y hasta el sorprenderse si se les pide crear un cocktail… en un
curso de barman, realmente a quienes tenemos el orgullo de ser instructores,
nos deja perplejos.
El compromiso hacia el trabajo es también un
ejemplo de los nuevos “bartenders”, deambulan por distintas barras y
emprendimientos donde no duran tres semanas, son “barmanagers” con menos de
seis meses de experiencia real y continua, hacen una temporada de dos mese en
un balneario de moda creen que ya lo han aprendido todo…y así les va.
En el área del Flair la informalidad es una constante que se
transmite desde los mismos instructores, en la búsqueda de un crecimiento personal
muchas veces apresurado, deben equilibrar el querer igualar éxitos como los de
Christian Delpech o Danilo Oribe, con generar el dinero con que solventarlo,
por lo que asumen compromisos con escuelas, empresas de bebidas, dueños de
boliches, a los que deben sumarse sus shows privados, horas de entrenamiento, competencias
en el exterior y ainda mais.
¿Es esta clase de estudiantes, esos que creen
llevarse el mundo por delante pero no recuerdan que tema se dio la clase
pasada, y lo que es peor, ni les interesa,
quienes estarán en las barras del mañana? ¿es esta clase de bartenders,
exitistas, egocéntricos e informales quienes llevarán el legado de los grandes
bartenders de nuestro pasado y presente por las barras del futuro?
De los cientos de alumnos que recibimos en
nuestras aulas año a año, son pocos, diría contados con los dedos de la mano,
quienes hacen sentir que nuestro trabajo día a día no es en vano, los vemos
interesarse constantemente en aprender, investigan, preguntan, crean y vuelven
por mas, cualquier información que tengamos para ellos es poca, y siguen
capacitándose, aprendiendo y creciendo día a día. Los vemos trabajando y
perdurando en sus bares, en los mejores, orgullosos pero no egocéntricos, exitosos pero no exitistas, profesionales de
verdad, lejos de la informalidad. Son el orgullo de nuestro trabajo, el de
nuestras escuelas, y lo serán de nuestra profesión.
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